Pablo Orleans -19/10/2012- La gente se manifiesta. Un derecho constitucional recogido en el Artículo 21 de la Carta Magna. La gente protesta y se asocia, expresando sus opiniones libremente como bien le ampara el Artículo 20 de la Constitución española, diciendo en sus dos primeros puntos que:
1. Se reconocen y protegen los derechos:
A expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción.A la producción y creación literaria, artística, científica y técnica.A la libertad de cátedra.A comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión. La Ley regulará el derecho a la cláusula de conciencia y al secreto profesional en el ejercicio de estas libertades.
2. El ejercicio de estos derechos no puede restringirse mediante ningún tipo de censura previa.
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Imagen | Paperblog.com |
Pues bien, según podemos leer en multitud de periódicos, "Interior pondrá coto a la difusión en internet de imágenes que dañen a policías", precisando que "existe un documento de trabajo, aún en estudio y sin que haya una decisión en firme de modificar la ley” para poner coto a la divulgación de esas imágenes. “No se trata de poner límites a la libertad de expresión, sino de evitar que los agentes corran riesgos en el ejercicio de sus funciones por la difusión de su imagen”, explicaron fuentes de Interior. Es decir: “No pretendemos que la prensa no pueda hacer su trabajo, que tome imágenes de cargas policiales u otras actuaciones, pero entendemos que en operaciones antiterroristas o en contra de las mafias hay que tener un criterio de mayor cuidado al difundir las imágenes".
Está claro que, en según que aspectos de las acciones que lleve a cabo la policía, debe haber una seguridad que impida que se reconozcan los agentes, pero en casos como el de las brutales cargas policiales llevadas a cabo en multitud de ciudades españolas en los últimos meses, en las que en muchos casos se han excedido y se han puesto en contra de sus propios ciudadanos a los que deben proteger, en esos casos, cuantos más testimonios haya, más demócratas y libres seremos. No podemos acotar la libertad de expresión ni de comunicar información. En el momento en el que nos dejemos poner sogas que nos vayan limitando nuestros derechos, que permitamos que nos quiten una cámara por grabar en una manifestación en la vía pública o nos multen por hacer fotos a un policía que se ha extralimitado en sus funciones de protección y control del orden público, en ese mismo instante, estaremos dando un paso atrás y empezaremos a parecer aquel país gobernado por uno, 'grande' y libre hijo de su madre.
Fuente | ElPaís