Pablo Orleans -15/05/2015- Casi un mes después de las elecciones andaluzas, la Comunidad Autónoma del sur de la España peninsular continua sin tener un Gobierno. Los partidos que componen el parlamento están diciendo unánimamente 'no' a la investidura de Susana Diaz como Presidenta de la Junta de Andalucía e impidiendo a la formación socialista que pueda gobernar con mayoria simple en la región. Una situación vista como pura estrategia desde la cúpula del PSOE, que acusa a los otros partidos de dejar a la Comunidad en un estado de desgobierno que perjudica a los andaluces. Sin embargo, por parte de los partidos que no están dando su apoyo a la política sevillana, los socialistas deben cumplir una serie de condiciones para recibir el apoyo o la abstención y, de este modo, permitir que se convierta en Presidenta de la Junta después de tres votaciones que no han llegado a buen puerto.
Si bien es cierto que los socialistas lograron el apoyo de gran parte de la población andaluza y fue un éxito para una formación que parecía perder fuerza ante la llegada de nuevas posibilidades, el juego electoral ha cambiado -más si cabe- con la inminente llegada de unas elecciones municipales y autonómicas que pueden cambiar el mapa político actual. Es por ello que a pesar de obtener un gran resultado representado por esos 47 diputados (a 8 de la mayoria absoluta) y ser, de largo, la opción más votada, Díaz y su partido no tienen vía libre para gobernar sin llegar a acuerdos. Y en este dilema de negociaciones alguien debe dar el brazo a torcer, normalmente quien pretende gobernar. Esto significa que, de las condiciones impuestas por los otros partidos, el PSOE debe decidirse, negociar y estar dispuesto a doblegarse para comenzar a gobernar. De otro modo, la repetición de elecciones es la 'otra vía' que no se descarta en Andalucía.
Pero, ¿qué es lo que piden los otros partidos y que es tan difícil de aceptar por los socialistas? ¿Es algo imposible de cumplir o simplemente no hay voluntad? Veamos.
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| Imagen | Elplural.com |
En primer lugar, el partido naranja pide la "firma por escrito y con 'garantías' de cumplimiento de un pacto anticorrupción" del mismo modo que la aceptación del "paquete de medidas económicas que propone su partido". Del mismo modo Juan Marín, portavoz de Ciudadanos en el Parlamento andaluz ha pedido las actas de parlamentario, sin esperar a la extinción de las mismas, de Chaves y Griñán. La formación asegura que no va a dar "ningún cheque en blanco".
QUÉ PIDE PODEMOS
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| Imagen | La Vanguardia |
QUÉ DICE EL PP
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| Imagen | El Mundo |
Sin convencer a nadie y con todos en contra, en el PSOE aseguran que los otros partidos “quieren bloquear la investidura” añadiendo que “ni gobiernan ni dejan gobernar” esperando los resultados de las elecciones municipales y autonómicas del próximo 24 de mayo. Pero yo me pregunto una cosa. Si hablamos de que cuatro partidos políticos (los tres mencionados más IU, con 5 insuficientes escaños), con diferentes ideologías, con diferentes modos de actuar y con diferentes propuestas, están votando en contra de la investidura de Díaz como Presidenta de la Junta de Andalucía, ¿es culpa de los otros cuatro partidos o debe hacer autocrítica la formación socialista en el modo de llevar las negociaciones? Quizá, si lo que quieren es gobernar, sería interesante poner un poco de su parte y dar el brazo a torcer en algunas de las condiciones ofrecidas. Los aires de grandeza de la vieja política y del intercambio de intereses se ha quedado obsoleto. El PSOE andaluz debe darse una cura de humildad y sólo así se evitará que en Andalucía se repitan de nuevo las elecciones.
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